20:42 | Author: Álex

Dame tu mano. No quiero que tires de mí.

Pero sí sentir esas turgencias cálidas de tu palma,

y notar que todo nos importa.

Y que "imposible" es el adjetivo de los necios.

Tengo más fuerza de la que me suponen. Mejor que lo ignoren.

Pues, junto a ti, me temerían.

Y dictarían leyes para proscribirnos.

Eres manantial de poder, para ir donde yo quiera.

Cuando juntos nos afligimos, nos duele la humanidad,

y nos crecen ansias infinitas, de solidaridades y amores nacarados.

No importa dónde estés.

Ni que te marches cuando claman los relojes.

Estás en mí. Y sé que en tí vivo.

Por todo eso,

dame la mano, que todos lo ignoren, menos yo.

Tú, por siempre, compañero.

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